5.- Sebastian Vettel, (3 de julio de
1987). Tetracampeón del mundo de Fórmula Uno.
Clásico pero
atrevido, implacable pero risueño. Este jovencísimo triunfador muestra un
fantástico equilibrio entre su figura juvenil, su magnífico cabello y su
elegante porte. Quizás le falte romper con los rígidos moldes germanos y
dejarse latinizar en la espontaneidad de sus gestos.
6.- Usain Bolt, (21 de agosto de 1986).
Record mundial de los 100 y 200 metros lisos. Tres medallas de oro en el
Mundial de Moscú 2013.
Atleta estrella;
por tanto verdadero Rey del deporte como tal. Su cabello al milímetro –pero muy
cuidado- le perfila como un nuevo Hijo del Viento. La perfecta “percha” que
moldea su cuerpo le permite una elegante y atractiva imagen cuando se decide
por el traje. Cuando apuesta por el sport, debería actualizar su vestimenta.
7.- Cristiano Ronaldo, (5 de febrero de
1985). Jugador del Real Madrid, máximo goleador de la historia en una fase de
grupos de la Champions.
Cuerpo
de gran modelo y portentoso deportista. Es admirado como apolíneo y estrella
balompédica en la élite, pero debería esforzarse un poco más para corregir una
imagen que en ocasiones le hace parecer un tanto chulesco y engreído. Quizás no
sea así y yo lo siento por él, pero a veces aporta una imagen equivocada de
prepotencia. Estéticamente sus cortes de cabello, peinado y cuidados faciales
son excelentes. Yo, Psicoesteticamente, me gustaría verlo con el cabello algo
más largo, porque el cabello es vehículo de seducción, comunicación y aureola
de triunfador.
8.- Chris Froome, (20 de mayo de 1985).
Ciclista, ganador del Tour de Francia 2013.
Cuando el
ciclismo es solo ciclismo, se convierte en un deporte de héroes. Entre ellos
destacó en 2013 sobremanera este joven de acusada ambición, determinación y
rebeldía, forjadas entre el África natal y la Europa de residencia. Escaso
cabello –está mejor cuando lo deja crecer en época de descanso-, compensado por
su expresividad y simpatía natural.
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Ramiro F. Alonso
Psicoesteta
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