No
sé si fue el inglés David Beckham el primero en abrir la puerta; pero si no fue
él, coincidió en el tiempo. Años antes, en 1962, cuando se eliminaron las
restricciones a los salarios del fútbol profesional británico, muchos
futbolistas empezaron a crearse su propia imagen luciendo prendas de las
mejores marcas.
Sin embargo, no es hasta el cambio de siglo cuando las firmas
de moda más importantes del mundo empezaron a escoger a futbolistas de élite
como embajadores de su imagen. Ellos son los nuevos modelos del siglo XXI y
nadie del sector quiere vivir alejado de estas estrellas mediáticas. Porque se
han convertido en líderes difusores de la moda. Ni que decir tiene que las
firmas de ropa deportiva se pelean por conseguir que el jugador del momento
aparezca con su logotipo. Todo está tan estudiado como la propia imagen.
Fíjense en Cristiano Ronaldo y Leo Messi, posiblemente los dos mejores
futbolistas del mundo.
El primero juega en el Real Madrid, equipo que luce una
equipación de la casa Adidas; el segundo en el FC Barcelona, club al que viste
la marca Nike. ¿Se han fijado qué zapatillas utilizan cuando juegan?
El
portugués unas Nike; el argentino unas Adidas. Todos ganan. Ambas firmas han
conseguido que los dos jugadores más famosos del momento aparezcan luciendo su
imagen. Pero no sólo hablamos de ropa deportiva. El mundo de la moda en general
está siendo 'dirigido' por lo que sucede en el fútbol. El poder de figuras como
Cristiano Ronaldo o Xabi Alonso -el futbolista del Bayern Munich lleva tres temporadas
siendo imagen de Emidio Tucci- está fuera de dudas. Ni siquiera es necesario
que los futbolistas estén en activo.
Por ejemplo, el francés Zinedine Zidane ha
sido elegido por la empresa Mango para ser la imagen de la colección de la
temporada primavera-verano 2015. No es la primera vez que esta firma confía en
un futbolista para atraer al público, ya que el año pasado utilizó la figura del
barcelonista Gerard Piqué.
Ni la primera vez que Zidane aparece como imagen de
una marca: Luis Vuitton contó con él para la campaña primavera-verano de 2011
en la que aparecía acompañado por Pelé y Maradona en una partida de futbolín,
inmortalizada por cierto por la fotógrafa Annie Leibovitz, premio Príncipe de
Asturias de Comunicación y Humanidades 2013.
No cabe duda de que el fútbol está
dando mucho juego a la moda. Porque los futbolistas son los iconos y apolíneos que
los jóvenes y no tan jóvenes imitan e idolatran.

Ramiro Fernández Alonso
Psicoesteta
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